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Con la entrada del verano y la exposición del sol, comienza a evaluarse la posibilidad de colocar muebles y sillas para jardín en el exterior. Así, un buen conjunto, al menos, se integra por una mesa y un par de sillas. Mientras que, las principales opciones que se evalúan para comprar son el metal, el mimbre y el rattán. En este sentido, las sillas de mimbre parecen una interesante selección, sobre todo porque añaden cierto estilo rústico, Mediterráneo y acogedor.
El mimbre es un material totalmente natural y se obtiene de arbustos como el sauce y que regularmente crece en zonas con árboles tropicales. Un material sostenible, ya que se puede renovar en un periodo inferior a los 7 años, lo que hace que sea perfecto para la producción de muebles. Ahora bien, algunas características de este material es que se pueden producir muebles de mimbre grandes y robustos que también pueden tener una amplia extensión de duración. De igual manera, se destaca la flexibilidad y maleabilidad del mimbre, con lo cual se puede realizar una extensa variedad de productos. Además de ser un material extremadamente ligero, por lo que es muy sencilla su transportación y colocación. También, otra característica que se destaca es que, las sillas de mimbre se pueden limpiar fácilmente, apenas y se pasa un plumero y se retira el polvo acumulado.
Los muebles para jardín de mimbre se destacan por ser muy ligeros y resistentes. Por lo cual, se pueden desplazar de manera sencilla de un lado a otro. Mientras que, para hacer más agradable el poder sentarse en ellos, algunas personas deciden colocar algunos cojines recubiertos, esto gracias a la resistencia del mimbre que puede soportar cierta cantidad de peso. En cuanto a diseño, los muebles de mimbre y ratán logran transmitir una sensación rústica, natural y mediterránea, por lo que no desentonan con cualquier tipo de decoración. Incluso, si se decide, se pueden tomar las sillas de jardín tejidas y colocarlas en cualquier cuarto del hogar (cocina, dormitorio y salón).
No. Aunque son sillas para jardín hechas de material natural, el compuesto es distinto y cuenta con diferentes características. Por lo que puede ser confuso elegir algunos de estos tipos de muebles para jardín. Donde la principal diferencia se centra en que los muebles de ratán puede ser más sólido y resistente, mientras que las salas de mimbre cuenta con un mayor nivel de maleabilidad para obtener muebles mejor acabados.
Ahora bien, con relación al mantenimiento, tanto en muebles de jardín de ratán o mimbre, requieren de colocar en un punto dónde no queden expuestos directos al sol. No utilizar agua directamente para la limpieza y mantenimiento, haciendo uso de un paño húmedo o aspiradora. Mientras que, si existen zonas agrietadas o débiles, es bueno hacer uso de complementos como el aceite de linaza. En tanto que, para extender la vida útil del mueble, es bueno aplicar una base de barniz o laca. Además, si se utilizan cojines, lo mejor es limpiar por separado cada pieza.