Cojín de lactancia

El cojín de lactancia es el complemento perfecto para la crianza de bebés. Ya que, facilita la correcta postura de la madre mientras amamanta a un bebé. En tanto, también permite la buena colocación del pequeño en el regazo mientras se alimenta. Elemento funcional que puede utilizar tanto padre cómo madre. Disponibles en diferentes tipos que, dependiendo del estilo y diseño, se pueden ajustar a necesidades específicas de colocación y suavidad.

¿Cómo utilizar un cojín de lactancia?

Para madres primerizas, el cojin de lactancia le puede ayudar a reducir la tensión en la espalda, producido por soportar el peso del bebé en el regazo. Por lo que, si no se sabe cómo colocar a un pequeño mientras toma pecho, el cojín para lactancia se puede ajustar a la cintura y dejar en el regazo. Mientras que, otros cojines se pueden colocar a lado recostado, brindando soporte y seguridad al niño en tanto se encuentra succionando del pecho o biberón. Así, la almohada para amamantar favorece la comodidad y postura tanto de la madre como del bebé. Además, también puede permitir la colocación del biberón, cuando el niño ya comienza a beber solo y requiere de mayor independencia.

Tipos de almohada de lactancia

Se destacan dos tipos de cojín para lactancia. Los que tienen forma de herradura, en U o tipo dona de lactancia. Cojín que se puede colocar alrededor de la cintura de la madre, mientras que en la base cuenta con una base suave para que repose el bebé. Un tipo de cojín que puede variar en tamaño y selección de material para mayor durabilidad y comodidad. Mientras que otro tipo de cojín lactancia es el que tiene forma de serpiente o churro. Un tipo de cojín que se destaca por contar con una forma completamente abierta. Y gracias a su estilo alargado se puede colocar al lado de la mamá en paralelo con el bebé. De tal forma que, permite acomodarse mejor e incluso puede facilitar dormir después de amamantar.

Pero, sin importar el tipo y diseño, los diferentes tipos de cojin lactancia para lactancia, en su fabricación, hacen uso de materiales como: lana, semillas, microperlas y hasta fibras de poliéster. Todas las anteriores, características que pueden afectar el grado de rigidez y comodidad de la almohada para lactancia.

Beneficios del cojín de lactancia

El uso de un cojin para lactancia permite que las mamás cuenten con una postura correcta al momento de alimentar a sus hijos. En tanto que, de igual manera, permite que el bebé también mantenga una correcta postura al alimentarse. Así, la madre no sufre de dolor de espalda o cuello y el bebé se alimenta bien sin incomodidad.

Incluso, en bebés con edad entre los 3 a 4 meses, les ayuda a mantener bien su cabeza, mientras duermen o se alimentan. Así, un padre puede hacer uso del cojín, pasando tiempo con el pequeño al proporcionar el biberón, y dejar la almohada lactancia al lado, generando la sensación de una presencia física, mientras el niño duerme. Mientras que, dependiendo del material con el que esté hecho el cojín, puede variar su durabilidad y limpieza.