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Se consideran coches clásicos aquellos que tienen al menos 30 años desde su fabricación o matriculación y que se encuentren en su estado original, sin haber sufrido cambios en sus componentes principales como motor, frenos, dirección, suspensión y carrocería. También pueden alcanzar la categoría de históricos por algún diseño distintivo, rareza o valor histórico. Los coches clásicos en venta suelen tener unas características singulares, además de líneas de diseño elegantes. Los hay de diferentes marcas y épocas y la afición por ellos incluye la restauración, la colección y la participación en exposiciones y eventos especializados en coches clásicos.
Los coches clásicos de segunda mano tienen ciertas características distintivas, además de la edad, que los hacen singulares respecto a otros coches y que son el atractivo de los coleccionistas. Por un lado está su diseño atemporal que ha dejado una marca en la historia del automóvil. Estos diseños son apreciados décadas después de la construcción del vehículo. Muchos han sido construidos con materiales de alta calidad con carrocerías metálicas de acero sólido que contribuyen a su longevidad. Otros han sido pioneros en innovación técnica, habiendo introducido en su día sistemas de suspensión, motores potentes o características de seguridad novedosas que los hacen únicos. Otra de sus características puede ser su potencia, que conlleva un alto rendimiento aún siendo simples mecánicamente si se comparan con los coches modernos electrónicos. Por otro lado, su carácter único y personalidad, muchas veces debido también a su exclusividad y rareza los hace sumamente atractivos a los ojos de los coleccionistas. Los coches clásicos de ocasión a menudo reflejan la artesanía y atención al detalle tanto en el interior como en el exterior. Incluso pueden tener un sonido característico. Por último no hay que olvidar el valor histórico y cultural de estos coches históricos de segunda mano , siendo en algunos casos un bien cultural inscrito en el correspondiente inventario.
En la venta de coches clásicos hay que tener en cuenta algunas cosas importantes para encontrar un término medio entre el buen estado del vehículo y un precio razonable por él, así se evita que la inversión en el vehículo se vea aumentada con continuas horas en el taller, pero encontrar coches clásicos baratos de segunda mano no es imposible. En primer lugar hay que investigar el modelo específico, su historia, posibles problemas específicos, valor de mercado, si puede haber problemas para encontrar repuestos y si es interesante que sea sencillo de mantener. Luego habrá que analizar el estado general del vehículo, si presenta arañazos, bolladuras, óxidos, etc que puedan repercutir en su valor. Es importante que no haya sido modificado en exceso y si puede ser que mantenga la tapicería y la pintura original. Para que un modelo no pierda valor lo mejor es comprarlo entre los 15 a 20 años desde su fecha de fabricación o matriculación pues es cuando los propietarios se deshacen de ellos porque empiezan a aparecer problemas, y a partir de entonces su valor empieza a subir. Aunque que sea práctico puede llegar a ser secundario, lo cierto es que así se disfrutará mucho más. Por último hay comprobar que tenga todos los documentos legales en vigor y todos los pagos de impuestos al día para evitar sorpresas.